Por Esteban David Rodríguez Flecha / info@salaurbana.com
Se trata de la Ley Núm. 174 de 16 de agosto de 2012 que declara el mes de junio de cada año como el “Mes de la Concienciación de la Paternidad Responsable en Puerto Rico”
La Ley Núm. 174, aprobada el 16 de agosto de 2012 en Puerto Rico, establece que el mes de junio de cada año será reconocido como el "Mes de la Concienciación de la Paternidad Responsable en Puerto Rico". Esta ley tiene como objetivo fomentar la importancia de la responsabilidad parental y destacar la necesidad de ser padres y madres responsables.
La paternidad y la maternidad no deberían ser actos fortuitos, inconscientes, irresponsables o violentos, sino el resultado del amor y el deseo de criar y educar a los hijos de manera consciente. Ser padre o madre se considera la profesión más difícil, ya que implica la responsabilidad de educar y formar a los hijos para que se conviertan en ciudadanos libres y dignos.
La Paternidad Responsable implica varios aspectos fundamentales:
Planificación familiar: Las parejas deben tomar decisiones informadas y planificadas sobre cuándo desean tener hijos, basadas en el conocimiento y la educación sobre el tema.
Compromiso y deber reciproco: Ser padres implica una responsabilidad y un compromiso tanto con la pareja como con el hijo, la familia y la sociedad en general.
Más que proveer necesidades básicas: Los padres deben proporcionar no solo vivienda, alimentación, educación y salud a sus hijos, sino también amor, amistad, tiempo y protección.
Conocimiento de los aspectos biológicos: Los padres deben entender los procesos biológicos relacionados con la concepción, saber cuándo y cómo evitar embarazos no deseados y cómo espaciar las gestaciones.
Control de los instintos y pasiones: La paternidad responsable implica dominar los instintos y pasiones a través de la razón y la voluntad, educándose sobre enfermedades de transmisión sexual y evitando acciones que puedan dar lugar a una paternidad irresponsable.
Consideraciones físicas, económicas, psicológicas y sociales: La paternidad responsable implica tomar decisiones conscientes en relación con el número de hijos y abordar temas como la preparación para el embarazo.
En Puerto Rico, además de esta ley, existe la Ley Núm. 356 de 23 de diciembre de 1999, que declara el tercer domingo de junio como el Día de los Padres. Es importante promover la paternidad responsable en toda la sociedad, incluyendo al Gobierno de Puerto Rico, para educar a las personas sobre la responsabilidad de ser padres.
La educación en paternidad responsable se centra en los siguientes puntos:
Cumplir con las obligaciones hacia los hijos: Proporcionar a los hijos los bienes materiales y espirituales necesarios para su subsistencia, como alimentación, educación, vivienda, cuidado de la salud, amor, comprensión y comunicación.
Elección de pareja basada en amor y respeto: La paternidad responsable comienza con la elección de una pareja basada en el amor, el respeto mutuo y la comprensión, con el deseo de compartir responsabilidades, aspiraciones, intereses, alegrías y tristezas.
Satisfacer las necesidades en cinco áreas fundamentales: Los padres responsables deben satisfacer las necesidades de sus hijos en cinco áreas clave. Estas son: biológica (cuidar la salud física de los hijos y tomar decisiones informadas sobre el número de hijos), psicológica (brindar confianza, motivación y amor a los hijos), socio-cultural (enseñar a los hijos a relacionarse positivamente y transmitirles los valores de la comunidad), económica (buscar ingresos para cubrir los gastos familiares) y educativa (garantizar la educación de los hijos y no permitir que trabajen en perjuicio de su salud, estudios y recreación).
La Ley Núm. 174 de Puerto Rico declara junio como el "Mes de la Concienciación de la Paternidad Responsable". Esta ley busca promover la importancia de ser padres y madres responsables, enfatizando la planificación familiar, el compromiso con los hijos, el cuidado de su bienestar físico y emocional, y el cumplimiento de las responsabilidades parentales en diversas áreas. La educación en paternidad responsable es fundamental para criar a una nueva generación de puertorriqueños comprometidos y responsables.
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